¡Quiero ser una princesa!...
Me dijeron una vez que yo no era una princesa ni la vida un cuento de hadas, ¿por qué?, creo que muchas veces la vida puede ser parecida a lo que uno desea que sea y todo puede cambiar dependiendo con que ojos se mire, desde el conformismo y el abatimiento la vida se me aparece gris, monótona, segura eso si, pero lineal, hay gente que esa linealidad le produce sensación de protección, de seguridad...a mi me produce lo contrario, una sensación de desprotección total, de preguntarme un "¿¿y ahora que??".
Yo sueño, y me digo en voz alta, que por qué no, por qué yo no puedo ser una princesa, por qué no puedo vivir mi vida como un cuento y por qué tu no puedes ser un principe azul, ya sé que destiñen ... pero si no destiñes, si no te arriesgas, tampoco ganas, de vez en cuando la gente debería darse un baño de color, dejarse desteñir a uno mismo de vez en cuando y ensuciarse cuando te destiña el otro, ¿por qué no??Si yo deseo, si lo sueño, si a mi manera casi lo he vivido, nadie ya me podrá quitar eso, yo a mi manera he volado a Nueva York,me he perdido en sus calles, me he alojado en el Chelsea Hotel,he ido a un paraiso y me he bañado en un mar tan increiblemente cristalino que su azul parece pintado, he visto al principito en su planeta (papá, es verdad, nosotros somos el principito de nuestra propia nube), he mordido una manzana recién caida de un arbol jugosa y sin pecado y te la he dado a morder a ti, ... De nosotros depende palpar los sueños y lograr que salgan de las páginas del cuento para hacerlos realidad.
Yo tengo todas esas cosas, soy una princesa, y este es mi cuento. ¿tú me crees?
añadido por nOsTaLgiE @ 10:30 p. m.
24 comentarios
Pues a eso me refiero, a veces deseo ser un poquito invisible...ir por las calles sin ser vista, ser anónima para todos aquellos que me conocen, desaparecer aunque sólo fuera durante unas horas, pensar que nadie me está echando de menos, que nadie está preocupado por mi ausencia, borrar de su cabeza todos los recuerdos que me albergan,...
Dicen que soñar no cuesta dinero asi que...vamos a ponernos en el caso de que me fuera a atravesar Estados Unidos de costa a costa através de la mítica Ruta 66(que le vamos a hacer...soy una romántica), aquella que va desde Chicago hasta Los Angeles a través de ocho estados: Illinois, Missouri, Kansas, Oklahoma, Texas, Nuevo México, Arizona y California, que recuerda a la perdida generación beat (Kerouac la mencionaba en "On the Road") y que ha inspirado tantas películas.
Es indispensable que sean de las que marcan el paso, vamos que suene a taconazo al andar, de esas de aqui vengo yo y que se sepa, no sea que en una parada noctámbula en un garito de carretera se ponga el respetable a marcarse una ranchera, de las que bailan todos a la vez: giro a la derecha, tres pasos laterales, giro a la izquierda, saltito golpeando los talones, vamos, que si no estas dentro de la danza, parece que le estén ofrendando algo a dios sabe que santo,y te pille a ti con las reebok blanquitas inmaculadas,que cómodas son, pero imponer no imponen y ya que, seguro que se va a hacer el ridículo más espantoso en el condenado baile ( me incluyo entre los no bendecidos con el don de la coordinación), por lo menos, que se haga con contundencia y haciendo ruido y que no sea porque medios no se ponen.
Para que nos quejemos de lo tarde que nos llega la jubilación, pero
9. No critiques a los madrileños porque se van todos los fines de semana de la ciudad, porque no la aguantan. No, los que se van los fines de semana son los que NO SON DE MADRIZ y vuelven a casa. Los madrileños salimos enPuentes, los dos días del fin de semana no nos dan para alcanzar los confines de Madriz y volver.