martes, abril 26, 2005

Anónima

A veces me gustaría ser anónima...me refiero a casi casi invisible, ¿alguna vez habeis soñado de pequeños en convertiros en invisibles con un sólo chasquido de dedos??...y así poder entrar en la tienda de chucherias de la esquina (quien no conocio una tienda de chucherias en la esquina...) y coger una de esas piruletas enoooormes que tanto te miraban desde el escaparate pero para la que la paga nunca alcanzaba; o ir a casa de Elenita, la hija del vecino del tercero, esa que siempre te miraba por encima del hombro y volverla un poco loca...un toquecito en el hombro aqui, su album con fotos de Rick Ashley volando por alla...

Pues a eso me refiero, a veces deseo ser un poquito invisible...ir por las calles sin ser vista, ser anónima para todos aquellos que me conocen, desaparecer aunque sólo fuera durante unas horas, pensar que nadie me está echando de menos, que nadie está preocupado por mi ausencia, borrar de su cabeza todos los recuerdos que me albergan,...

Qué bónito sería ser anónima un día, susurrar mi identidad a tu oido y observar tu alegría al descubrirme.

2 comments:

Anonymous Anónimo dijo...

No confundir ser anonimo con no existir! tenemos quien sueña con hacerse invisible, colarse en donde se quiera, pasar la noche en el corte ingles, besar a las chicas guapas por la calle y disfrutar de un anonimato total. Creo que la naturaleza humana nos hace ser felices con todo lo contrario, osea que no hay nada menos gratificante que hacer las cosas solo o sin que nadie lo sepa, necesitamos tener testigos de nuestras experiencias para disfrutar mas de ellas, en determinados casos con contarlo es suficiente, pero en otros guardarlo puede llegar a ser frustrante, parece como si no lo hicieramos, como si no existieramos... Quien se puede esconder para siempre el hallazgo de un amor? el encuentro de un tesoro? un viaje, o un momento inolvidable... quien no se a frustrado al asomarse a una ventana y ver una ciudad en fiestas, gente feliz en la calle y se a sentido cero mirando como la gente disfruta de su existencia y de transmitirla a los que le rodean, en el coche atrapado en un gran atasco y sentirse ajeno a una calle llena de ajetreo, de vida de gante que va y viene, se mira y comparte su presencia. Yo quiero testigos y complices.Solo quiero ser invisible el 8% de mi vida y el 92% restante necesito ser visible... Que luego nadie diga que yo no existi!!

Por cierto... que curioso, todo esto lo cuenta un anonimo! paradojas de la vida..

abril 26, 2005 3:39 p. m.  
Blogger nOsTaLgiE dijo...

Por supuesto que no me refería a no existir...yo quiero existir!!y ser consciente de que existo, respirar cada segundo como único. Hablaba de un anonimato puntual, egoista, y elegido...Es verdad eso de que a veces parece como si algo no hubiera sido real si no es compartido, o por lo menos si no es contado, el simple hecho de ver una pelicula en un cine cobra más valor si se hace con alguien, alguien que mire lo que tu estas mirando...y poder comentarlo. Un sintoma de enamoramiento son las ganas de salir a un balcón y gritarlo y que se haga público, que lo sepa todo el mundo, que te señalen con el dedo y diga la gente a tu paso: "mira, mira, esa es la que tiene un amor, se la nota, está enamorada, es afortunada".
Yo no quiero viajes sin complice ni tesoros escondidos, sólo quiero un anonimato puntual para despues salir al balcon y gritarle al mundo entero lo que siento.

abril 26, 2005 4:45 p. m.  

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